¡Felicidades Google!
El gigante de Internet, convertido en el buscador más famoso del mundo, celebra su mayoría de edad
Historia
de Google
El
buscador más famoso del mundo nació en un garaje en Menlo Park,
California y, se constituyó como sociedad el 4 de septiembre de
1997 . Sin embargo, sus creadores escogieron el día 27 del mismo
mes como fecha de cumpleaños para hacerlo coincidir con un récord
de páginas indexadas.
Larry
Page y Sergey Brin, fundadores de Google, se conocieron en
la Universidad de Stanford en 1995, cuando tenían 21 y 22 años
respectivamente. Juntos diseñaron para su tesis doctoral
“BlackRub”, un buscador que determinaba la importancia de
las páginas web a través de enlaces.
Poco
tiempo después, y viendo que aquéllo funcionaba, decidieron
cambiarle el nombre a Google, un juego de palabras basado en
el término matemático gúgol (el número uno seguido de 100
ceros).
En
1998, Andy Bechtolsheim, cofundador de Sun Microsystems, extendió un
cheque de 100.000 dólares para la entidad que hasta entonces no
existía, naciendo así Google Inc.
Google, 18 años después
Hoy,
con más de 500.000 empleados, Google es el buscador más usado
por los internautas de todo el mundo para realizar búsquedas en la
red.
Su
apuesta por el entorno móvil con el sistema operativo Android,
en 2007, fue uno de los grandes aciertos de la compañía y,
actualmente, es el sistema operativo móvil con más penetración en
el mercado (95%).
El
gestor de correo electrónico Gmail, el navedor web Google
Chrome, el sistema cartográfico Google Maps, que se ha
convertido en el más usado del mundo, el servicio de mapas basado en
imágenes de satélite, Google Earth, o el sistema de
almacenamiento de archivos Google Drive, son algunos de los
grandes éxitos de Google que acumulan millones de descargas en los
últimos años.
Hace
10 años, Google compró la plataforma de vídeos YouTube por
1.300 millones de euros, que hoy cuenta con más de 1.000 millones de
usuarios mensuales.
El
futuro
En
los últimos tiempos Google se ha ido adentrando en el mundo del
hardware, de donde ha surgido la gama Nexus. El reproductor
multimedia Chromecast ha sido uno de sus grandes éxitos en
este campo.
La
firma ha crecido adquiriendo en los últimos años empresas como
Nest, Boston Dynamics o Waze, por lo que en el año 2015 creó
Alphabet Inc. para poder englobar todo bajo un mismo nombre
fiscal.
En
el futuro Google ve un planeta totalmente conectado a Internet, por
ello ha ideado "Project Loon", una solución con
globos aerostáticos, para poder acercarse a las dos terceras partes
del mundo que carecen de conexión.
Así
usabas Internet antes de Google
El
meme muestra a una joven buscando una ficha en un archivo. “El
Google de la prehistoria”, dice el texto. También hace mención al
buscador este artículo de Verne: "Google antes de Google: así
se resolvían las dudas en las bibliotecas del siglo pasado". El
texto recoge algunas de las preguntas que llegaban a la Biblioteca
Pública de Nueva York antes de internet. Los trabajadores del centro
contestaban por escrito a cuestiones como “¿cuál es el valor
nutricional de la carne humana?”, “¿por qué aparecen tantas
ardilas en las pinturas inglesas del siglo XVIII?” y “¿qué tipo
de manzana comió Eva?”.
¿Dónde
buscábamos antes de Google?
Google
no fue el primer buscador ni tampoco fue el más popular durante sus
primeros años. Yahoo, Altavista y Lycos eran
algunos de los sitios a los que preguntábamos dudas importantes,
como por qué las huchas tienen forma de cerdito.
Pero
hoy en día, las webs de Google son las más visitadas de internet y
la empresa controla el 65% de las búsquedas, como explica Andrew
Keen en Internet no es la respuesta. En mercados como Italia y España
se llega a superar el 90%.
¿Y
seguimos visitando las bibliotecas?
El
Ministerio de Cultura publica datos, pero solo desde 2010: el número
de visitas a las bibliotecas públicas permanece estable en torno a
las 2,7 por habitante desde entonces.
Googléame
esto
El
buscador es tan popular que se habla de “googlear”, verbo
que en inglés, to google, está incluido desde 2006 en los
diccionarios de Oxford y de Merriam-Webster, que documenta su primer
uso en 2001. Ya en 2002 fue una de las palabras del año para la
American Dialect Society.
Una
búsqueda relativamente habitual somos nosotros mismos. El hábito
de autogooglearse fue el objeto de un estudio y de un artículo
de Time publicado en 2009: “La razón por la que la gente se busca
a sí misma es que siente curiosidad por lo que otras personas ven
cuando buscan su nombre”.
¿Antes
memorizábamos más?
Google
es uno de los servicios que funciona a modo de “memoria
externa”, como escribe Clive Thompson en Smarter Than You
Think. Hay mucha información que no necesitamos ni siquiera anotar,
ya que podemos buscarla muy fácilmente. También podemos incluso
buscar entre nuestros documentos, si usamos Google Docs, con lo que
no hace falta ni que tengamos todo nuestro trabajo organizado.
La
desventaja es que Google no olvida nada: ni la capital de
Mongolia ni ese tuit de hace seis años que ahora te avergonzaría si
lo releyeras o ese comentario que dejaste con tu nombre real en un
diario deportivo.
¿Cómo
enviábamos mails?
Gmail
existe desde 2004. En 2015 había más de 100 millones de usuarios
registrados en el servicio de correo de Google y se ha convertido
(casi) en un estándar: es muy habitual tener una dirección de
nuestra empresa para el trabajo y otra de Gmail que consideramos
particular.
Antes
de Gmail, era común que abriéramos cuentas de correo en Hotmail
(hoy Outlook) y Yahoo (que, por cierto, sigue siendo la tercera web
más visitada), además de en otros servicios ya fallecidos como
Terra, Eresmas y Mixmail, entre otros.
Son
muchos quienes lamentan que cada vez escribimos correos electrónicos
más cortos y más funcionales, y que ya no dedicamos tanto tiempo a
intercambiar correspondencia con otras personas. Quizás, de nuevo,
sea por influencia del móvil: muchas veces contestamos desde el
teléfono, donde no es tan agradable pasar un rato tecleando. Otros
van más allá y sugieren que antes de Internet escribíamos cartas,
hábito que no se ha visto reemplazado, sino que simplemente ha
muerto.
¿Cómo
sabíamos dónde estábamos?
Hoy
en día es casi imposible perdernos. Abrimos el móvil y tenemos a
mano Google Maps, la app de localización más usada si
exceptuamos a los usuarios de Apple: Apple Maps viene preinstalada en
los iPhone y hasta la llegada de la nueva versión del sistema
operativo de la compañía, ni siquiera se podía borrar.
Google
Maps existe desde 2005 y aunque no ha reemplazado del todo a los
navegadores GPS y a los planos de papel, se usa a menudo para saber
dónde queda el bar en el que nos están esperando y para programar
viajes por carretera.
Antes
se utilizaban muchas más guías de papel, ya fueran las de
ciudades que consultaban los taxistas como las de carreteras que
estaban guardadas en muchos de los coches de nuestras familias.
También
consultábamos otros servicios online para programar rutas
largas, como Vía Michelin y la Ruta Campsa (hoy Guía Repsol), por
poner dos ejemplos.
Aparte
de eso, había otra cosa que hacíamos a menudo: preguntar.
Hoy en día solo preguntamos si estamos en el extranjero y no nos
aclaramos con el mapa, lo que podría terminarse en la Unión Europea
si se acaba con las tarifas de roaming. También cuando nos quedamos
sin batería, cosa que con los teléfonos actuales ocurre cada tres o
cuatro minutos (a lo mejor exagero, pero muy poco).
¿Demasiado
poder para una sola empresa?
Por
poco que entremos en Internet, lo normal es usar Google varias veces
al día. Ya sea para buscar algo, para ver un vídeo (YouTube es
propiedad de Google desde 2006) o para leer algún blog (Google
compró Blogger en 2003).
Se
trata de la segunda marca global más valiosa, después de
Apple y según la revista Forbes. Y todo esto gracias a un modelo de
negocio que en ocasiones se ha llamado Googlenomics y que ha sido
replicado por muchas empresas de Internet. Consiste en ofrecer gratis
sus servicios a los consumidores, que a cambio proporcionan, muchas
veces sin saberlo, toda la información que la empresa puede extraer:
qué buscan, desde qué dispositivo, a qué horas, qué páginas
visitan (el navegador Chrome también es de Google) y por dónde se
mueven, entre otros datos que comentábamos en este artículo.
Su
objetivo: vender publicidad. Le va bien, ya que en 2015 Google
se llevó la mitad de los ingresos publicitarios en Estados Unidos.
Como
recuerda Keen, “todos trabajamos gratis para Facebook y Google,
fabricando los datos personales que hacen que estas empresas sean tan
valiosas”. Este modelo permite a la empresa contar con 46.000
empleados, que en su opinión es muy poco para los ingresos que
genera, sobre todo en comparación con otras compañías que mueven
volúmenes de negocio comparables.
Última versión's opinion: “La gente del siglo XXI ya no cree en Dios: cree en Google”
Y
es que Google lo sabe TODO. Vivir en la sociedad actual conlleva
estar conectado en cualquier momento y desde cualquier lugar a la red
(eso, o permanecer al margen del resto del mundo) y Google juega un
papel fundamental en este sentido. Google nos ha proporcionado
infinidad de ventajas y facilidades para adaptarnos a las nuevas
tecnologías, lo que también ha supuesto un cambio en nuestros
hábitos de vida. Tenemos toda la información disponible a un sólo
clic, sin necesidad de vestirnos y salir a la calle en busca de una
biblioteca o una librería. Los del siglo XXI ya no utilizamos
diccionarios de papel, pudiendo tener en mucho menos tiempo miles de
resultados en la web y en distintos diccionarios electrónicos. Y es
que esa es otra ventaja, podemos comparar información de distintas
fuentes sin apenas esfuerzo, aunque en la mayoría de las ocasiones
tengamos que estar muy desesperados para acceder a otros resultados
que no sean los que aparecen en la primera página. Conclusión:
estamos informados en todo momento de todo o, al menos, tenemos esa
oportunidad. Gmail es utilizado por muchísima gente como medio de
comunicación, es fácil y rápido. Y
es que a los del siglo XXI eso de enviar cartas nos suena muy lejano.
Tampoco es necesario guardar la información en un USB que se puede
perder o se te puede olvidar: ¿para qué? si ya tenemos Google
Drive. ¿Un vídeo? Youtube. ¿Qué te has perdido? Abre Google Maps.
Y es que Google ha cambiado nuestra forma de pensar. Así que,
gracias por habernos facilitado
tanto la vida... ¡Muchas felicidades! Y, como se suele decir, que
cumplas muchos más porque el día que faltes,
Google, no vamos a saber qué hacer y no podremos preguntártelo.
San Google.....
ResponderEliminarMe gusta mucho tu comentario personal.
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